Promocionan vía online propuestas musicales peruanas

Dorog Records, un sello discográfico virtual, se ha convertido en difusor en línea y de manera gratuita, de las propuestas musicales que tienen que ver con la electrónica, el rock, lo experimental y la fusión de todo ello con sonidos peruanos.

Con tan solo conectarse a internet, cualquiera puede acceder gratuitamente a más de un centenar de archivos de música contemporánea producida en Perú; muchos de ellos realmente sorprendentes por estar provistos de rasgos inequívocamente locales, a pesar de enmarcarse en estilos cosmopolitas y de recurrir a tecnologías de avanzada.

"La idea es editar la música más nueva y joven que menos canales de distribución tenga", dice Giancarlo Samamé, cabeza de esta disquera, cuyo nombre es una sutil variación de la palabra 'gordo' escrita al revés.

"Mi intención es tener un gran catálogo de música nacional bien selecta", anota.

Esta aventura se inició en 2008 y a la fecha cuenta con más de 100 referencias descargables, divididas en cuatro categorías: Marginales (dedicada al rock y derivados afines), Beats (enfocada a lo electrónico), Inexplicables (para propuestas inclasificables) y Compilaciones.

Entre estos lanzamientos figuran los trabajos de artistas tan interesantes como Luján, personaje que en sus producciones ha mezclado con una naturalidad pasmosa electrónica con música criolla, afroperuana, y piezas de nuestra cultura popular de masas, como boleros cantineros y el tema del recordado programa televisivo Trampolín a la Fama.

Por su parte, El Paso (colectivo que integra Samamé) y el cuarteto Vía 149 (en su álbum titulado Partida) introducen elementos del folclore sobre bases rítmicas de la cumbia, procesadas electrónicamente, para ir al encuentro de ritmos y sonidos de lo más diversos.

El recopilatorio Lima Café Vol. 1 grafica mejor las intenciones de Samamé de darle salida a propuestas contemporáneas de sabor nacional.

Esta colección incluye a artistas como Lima Tropical Beats y al cusqueño Trino, entremezclando elementos de la música bailable costeña –los primeros– y el canto de José María Arguedas –el segundo– con el tecno y lo downtempo, respectivamente; pero también recoge a trabajos más ortodoxos que nada tienen que envidiar a los realizados en Europa o Norteamérica, como los de Theremyn_4 o Alva & Raggio.

Tanto en esta selección como en los dos volúmenes de Marginales (un catálogo impresionante de rock local en el que tienen cabida desde el ska de Vieja Skina hasta el canto urbano de Juan Luis Dammert) la dicotomía entre lo nacional y lo cosmopolita queda plasmada de la mejor forma.

PARA LA COLECCIÓN

Siendo la distribución en línea de estos discos gratuita y abierta para todos (y, por supuesto, autorizada por sus autores), ¿qué es lo que Samamé gana con ello?
"Si se ve desde ese punto de vista, como Dorog estoy ganando currículo y posicionando la marca", responde este diseñador gráfico entrometido en la música. Su intención en el futuro es ampliar los servicios que su sello pueda ofrecer.

"Ya no solo se trataría de poner la música de los artistas en línea, sino también de fabricar sus discos y ofrecerles trabajos de merchandising", añade.

Ya desde hace casi un año, y animado por el interés generado por las Ferias de Sellos Independientes, Samamé ha empezado a sacar ediciones limitadas en formato físico del material disponible en internet.

Éstas vienen en empaques elaborados a base de material reciclable. Algunas, según sea el caso, llegan a incluir en su presentación gráfica monedas y otros objetos (la portada de Fotografía, CD de Luján, muestra una diapositiva real, que varía en cada ejemplar).

 "Es como si compraras un disco con descuento", dice Giancarlo al respecto. "Es devaluar lo que en la vida cotidiana tiene determinado valor para convertirlo en un objeto de colección".

Otra de sus proyecciones es la de reeditar en ese formato discos valiosos que ya no están disponibles. Ya lo hizo con Indiferente de la banda Pastizal, "pero –añade– me gustaría también hacerlo con el disco de El Ghetto o el primero de Cimarrones".

Por lo demás, en la página web de Dorog pueden descargarse interesantes producciones de hace algunos años, como el debut de los experimentales Ertiub o el del colectivo La Pandilla Basura.

También apunta hacia algo más ambicioso: darle salida a los trabajos de músicos académicos peruanos como Edgar Valcárcel o Celso Garrido Lecca. "Ninguna disquera se da cuenta que se trata de documentos importantes".

Eso sí, los tirajes serían breves. "La idea es seguir siendo uno mismo el que controle el volumen de producción", indica Samamé. La filosofía del 'hazlo tu mismo' propugnada por la contracultura punk se mantiene viva e independiente en nuestro país; eso sí, con una pequeña ayuda de la tecnología y del amor al arte.

Fuente [Andina]